Se llama protección contra incendios al conjunto de medidas que se disponen en los edificios para protegerlos contra la acción del fuego.
Generalmente, con ellas se trata de conseguir tres fines:
Las medidas fundamentales contra incendios pueden clasificarse en dos tipos:
Cuando el incendio ya ha sido detectado hay que poner en marcha los servicios de emergencia. Es importante que todos los trabajadores hayan sido instruidos en cuanto a las salidas del edificio, los procedimientos de evacuación y las funciones que deben asumir en estos supuestos:
1. Llamar a los bomberos.
2. Ayudar a las personas minusválidas.
3. Revisar que el local está vacío.
4. Hacer de enlace con los bomberos.
Además, un incendio puede provocar diversas afectaciones a las personas; entre las más importantes se encuentra las quemaduras. Un alto número fallece todos los años por esta causa y otros más sobreviven con secuelas que afectan su imagen y funcionamiento corporal, así como su participación en la sociedad.
Una quemadura es una de lesión en la piel causada por el contacto con altas temperaturas como llamas, líquidos calientes, vapor, electricidad y químicos, así como por sobreexposición solar o fricción. Puede abarcar tejidos u órganos internos y se miden por grado, extensión y profundidad.
Por grado
Afectan sólo la capa exterior de la piel. Causan dolor, enrojecimiento e inflamación.
Afectan capas externa e interna de la piel. Producen dolor, gran enrojecimiento, inflamación y ampollas.
Afectan los tejidos más profundos y hasta los huesos. Producen una piel de coloración blanquecina, negruzca o carbonizada, tras un episodio inicial de extremo dolor.
También existen las quemaduras de las vías respiratorias, éstas ocurren por inhalación de humo, vapor, aire sobrecalentado o gases tóxicos.
Las quemaduras se producen mayormente en el ámbito doméstico y laboral, tan solo en México 517 personas fallecieron en 2014, de ellas 45 por ciento de las quemaduras fatales ocurrieron en el hogar y un 39 por ciento de las quemaduras no fatales se presentaron en niños de 10 años
Entre los factores de riesgo, destacan los siguientes:
A nivel mundial las quemaduras ocasionan aproximadamente 180 000 muertes al año siendo bebés y niños los más vulnerables ya que su piel es más delgada y sensible, y su resistencia al trauma es mucho menor.
Promover el uso de materiales y telas retardantes de fuego
Implementar programas y acciones educativas dirigidas a la población infantil y adulta mayor además de programas de primera respuesta
Establecer y aplicar leyes para prevenir quemaduras, por ejemplo: fabricación, uso, venta y transporte de juegos pirotécnicos
Promover el uso de detectores de humo o de calor y rociadores automáticos
Fomentar el uso de estufas seguras y evitar que niñas y niños menores de 5 años entren en contacto con ellas
Identificar y eliminar riesgos en el hogar (cerillos, veladoras y encendedores)